¡Hola! Soy Harry BYD y aunque a simple vista soy un automóvil, en realidad soy mucho más que eso. Soy el guardián silencioso de tus días grises, el compañero fiel de cada aventura, el auto más “pinta” de la cuadra, el testigo de los días más felices junto a la familia, el que acompaña en la rutina, el que a veces necesita de cariños para brillar, el que te escucha cuando nadie más lo puede lograr, Harry.

Cada mañana, cuando el sol está a punto de asomarse, los gallos empiezan a desperezarse, y se acaban los gritos de la casa, escucho y siento la presión del botón de encendido, es hora de despertar. Te subes a bordo, y juntos nos preparamos para otro día lleno de aventuras, de tareas y de momentos que quedarán grabados en mi memoria para siempre. Nos ponemos en marcha, y dispongo la mejor experiencia silenciosa y potente para evitar el estrés desde tan temprano, aunque ojalá estuviera en mis manos controlar la caótica ciudad donde vivimos, pero me es un poco imposible. Mientras conduces, siento la conexión entre nosotros, una mezcla de confianza y tranquilidad para llegar donde necesites asegurando el funcionamiento para que todo salga de la mejor manera posible.

Recuerdo la primera vez que nos vimos, te subiste, estabas ansioso por conocerme y yo de conocerte, escuchar tus canciones favoritas y sentir el peso de tus días. Cuando me viste sentí una conexión inexplicable, como si nos estuviéramos esperando el uno al otro durante toda la vida, el rojo brillante de mi cuerpo se reflejaba en tus ojos. De lo único que estoy seguro es que estábamos ahora soñando con nuevos destinos. 

Recuerdo la primera vez que llevamos a los niños al colegio, las risas y las preguntas curiosas por cada botón de mi cuerpo no dejaban de sonar, me aseguraba de ir suave y sin saltar tanto, a pesar de que quería brincar de la felicidad. 

Me encanta formar parte de los rituales que tenemos como familia, las idas al parque, rodar por largas carreteras, cargar sus compras y las escapadas de los fines de semana cuando el suave susurro del viento acarician mi carrocería. Con cada kilómetro recorrido me siento más conectado a ti, he aprendido a conocer cuando tienes prisa y vamos tarde al trabajo, o cuando simplemente queremos andar para disfrutar el paisaje y los atardeceres hermosos. Aunque no todo ha sido como lo esperamos , te has sentido cansado yo estoy ahí para protegerte, con mi techo como escudo para cuidarte de la lluvia haciéndote sentir más tranquilo.

Soy tu refugio, el cómplice de risas que muchas veces solo tu entendías, tu hombro en los días difíciles donde puedes dejar tus luchas internas, soy tu amigo donde puedes desconectar y recargar energías, un lugar seguro donde no te juzgarán, soy y seguiré siendo parte de tu historia. 

Al final del día, cuando todos duermen y me estacionas en casa, siento que también formo parte de este hogar. Sé que mañana o pasado será otro día lleno de emociones, y estaré listo para encenderse, una vez más, y seguir siendo el compañero fiel en cada kilómetro.

Así que no, no soy solo un auto. Soy parte de tu vida, de tus recuerdos, de tus rutinas y tus aventuras.

 

"No importa lo bueno que seas, si estás donde no te valoran"